Para el ‘Homo antecesor’ el canibalismo era lo mas rentable
Un nuevo trabajo analiza el comportamiento caníbal de las poblaciones de Atapuerca (Burgos) de hace un millón de años, cuyos resultados ponen de manifiesto que la antropofagia era una estrategia rentable para Homo antecessor.
Numerosos estudios han demostrado que todos los animales adaptan sus estrategias de alimentación para optimizar el balance coste-beneficio. Partiendo de este principio, investigadores del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) han estudiado el comportamiento caníbal de Homo antecessor, reexaminando los datos aportados por otros estudios previos. Su trabajo se publica en la revista Journal of Human Evolution.
No solo han estimado la cantidad de alimento que podría obtenerse de cada uno de los animales consumidos por Homo antecessor (el beneficio) y el esfuerzo que habría supuesto obtener y procesar cada uno de esos animales (el coste), sino que además han calculado el coste y el beneficio de consumir otros humanos en comparación con los de otras presas.
En comparación con otras presas, de los humanos se podía obtener una gran cantidad de alimento a un bajo coste
“Nuestros análisis muestran que Homo antecessor, como cualquier predador, seleccionaba sus presas siguiendo el principio de optimizar el balance coste-beneficio, Y además también muestran que, considerando solo ese balance, los humanos eran una presa de ‘alto rango’. Esto quiere decir que, en comparación con otras presas, de los humanos se podía obtener una gran cantidad de alimento a un bajo coste”, explica Jesús Rodríguez, coautor del estudio junto con Ana Mateos y Guillermo Zorrilla.
Dieta caníbal
Uno de los resultados más sorprendentes ha sido que los humanos fueron consumidos en una proporción mucho mayor de lo esperable en función de su abundancia respecto a otros animales. Esto podría explicarse por una alta tasa de encuentro entre humanos.
Como explica Ana Mateos, “para Homo antecessor era más fácil encontrarse con un humano que con otro animal. Una de las posibles explicaciones de esa alta tasa de encuentro entre humanos es que los cadáveres canibalizados fueran de miembros del grupo muertos por diferentes causas”.
El estudio se ha realizado desde el punto de vista de la ecología del comportamiento humano, que trata de explicar el comportamiento de los animales aplicando el principio de que las acciones de cualquier individuo buscan como fin último garantizar su supervivencia y la de su descendencia, lo que se traduce en la búsqueda del mayor beneficio posible al menor coste.